Gastronomía ecuatoriana, inspiración y orgullo. Una conversación con Chef Alejandro Huertas

Alejandro Huertas, nuestro chef aliado, fue uno de los finalistas en el concurso mundial de tapas en España en noviembre del 2022, utilizando ingredientes nativos ecuatorianos y compartiendo la autenticidad de nuestra gastronomía.

Además, durante sus días en España realizó colaboraciones con distintos chefs como Rubén Arnanz y Pachi Larrea, otro chef ecuatoriano cliente y aliado nuestro, ya establecido en este país con su propia pastelería. 
Alejandro compartió momentos de inspiración por medio de una gastronomía que trascendió fronteras y conversamos con él para conocer un poco más de esta experiencia.

¿Quien es Alejandro Huertas? ¿Cómo te describirías a nivel profesional y personal?  
Alejandro Huertas es un cocinero apasionado amante del Ecuador con todo su corazón, yo pienso que no existe un mejor lugar que nuestro país. La gastronomía, cultura y todo lo que engloba el país.  

Como persona me considera tranquilo, casual y deseo cambiar la concepción que tienen del Ecuatoriano. Pienso que aquel que represente al nuevo CEO del mundo debe poder manejar un Ferrari, pero también poder comer en un mercado, estar vestido super top, pero también usar sandalias y pantaloneta.

Yo creo que el ser casual no solo con la vestimenta sino como un estilo de vida. A veces tenemos equipajes muy pesados encima de nosotros, cuando en realidad la vida es muy corta. “HAY QUE VIVIR LA VIDA AL MAXIMO”.

¿Cuáles son los sabores que marcaron las diferentes etapas de tu vida? 
Los sabores son como un hilo conductor en la cocina. 
Tengo varios sabores a lo largo de mi vida; comencé con una “Etapa Picante” porque he sido rebelde desde joven, porque he tratado de no seguir al resto para no sentir que soy una oveja; de hecho, siento que eso no está mal, uno tiene su forma de ver la vida. Esta etapa picante lo comencé en el colegio, con varias carreras que no termine, luego me fui por otras carreras que de igual manera no termine y finalmente me conecte con la gastronomía. 

Luego tienes la “Etapa Amarga” en donde no sabes que hacer, hasta que encuentras o tienes necesidades, por ejemplo, la creatividad nace de las dificultades de las estas partes amargas de aquello que vemos como complicado. Como yo lo veo hay que sufrir para ser creativo. Aquella parte amarga también representa las cosas que piensas y no tienes tan claras porque estas buscando aquello que imaginas, pero no encuentras hasta que lo tienes en frente y eso me paso con la gastronomía encontré una pasión, una aventura porque te permite salir, sentir y eso es super chévere. 

Luego está la “Etapa Dulce” donde ya encuentras esa creatividad eso que te apasiona y dices por fin lo logré, ahpi encuentras el cariño por aquello que haces y yo lo relaciono como el final del Menú donde las personas hacen espacio para el postre, para aquello dulce que los hace feliz. 

Estos sabores encuentras un Umami encuentras todo el mix de sabores por los que tuve que pasar y entendí muchas de la vida y empiezas a reír, llorar, y este constante cambio es increíble. 

¿Cómo ha sido el año 2022 para ti? ¿Cuál es la palabra que determinaría este año?
Este año ha sido lleno de muchos obstáculos, pero lleno de metas. Soy una persona que se siente incómodo cuando estoy conforme y por eso necesito salir de mi zona de confort. Crear un equipo sólido, fuerte y madurar como profesional es entender que hay muchas cosas allá afuera, más allá del egocentrismo que tenemos los chefs y entender que hay que regresar a los nuestros.

¿Cuáles fueron tus pasos para llegar a clasificarte en este mundial? ¿Cómo te sentiste cuanto te enteraste de la noticia? 
Primero nosotros participamos en este mundial por dos razones específicas: 
Por mis socios y mi equipo siento la necesidad de que sientan orgullosos y sepan que todos es posible con mucho trabajo y esfuerzo. El profesionalismo no significa llenarte de títulos sino en buscar la excelencia en lo que se realiza en el Ecuador. Deseo que los Ecuatorianos rompan los paradigmas y piensen que nuestra gastronomía tiene mucho por ofrecer y que no tiene nada que envidiar a otros continentes. 
La premisa es que los sueños se cumplen. 

¿Cómo fue tu preparación para este mundial? 
Uno nunca está listo hasta que realmente te enfrentas a todo lo vivimos en España en entender un poco más de que trataba este mundial, al estar ahí comprendimos que no solo es una competencia sino saber que está pasando al otro lado del mundo, saber que está pasando en un continente que nos lleva diez años en cultura, gastronomía; ahí empiezas apreciar realmente lo nuestro. 

Ecuador al ser un país pequeño en comparación con el resto del mundo no tiene nada que envidiar al resto de países, debido a que es un baluarte gastronómico del mundo, que nuestra misma gente debe comenzar a apreciar. 

Estoy convencido que Ecuador es país muy rico y podemos llegar a ser grandes exponentes no solo con la gastronomía. 

¿Cómo concebiste las recetas de estas tapas? Cuál fue el proceso de conceptualización del boceto al plato. 
Siempre basándonos en el inicio de todo, que está en el campo, no sólo como agricultores, sino en el campo como personas que siempre están buscando algo diferente. Yo no quise realizar una receta tradicional ecuatoriana porque creo que debemos rendirles un homenaje a las abuelas, tías, mamás que tienen esas recetas que son muy diferentes entre sí. No quería centralizar la cocina ecuatoriana en una sola región del Ecuador, lo que necesitamos en estas competencias mundiales es que se den cuenta que el Ecuador es uno sólo. Me base en los productos, en los que hemos aprendido, en los viajes que hemos realizado, en las conversaciones que hemos tenido, en cómo llega el producto, basándome en cómo podemos ser más locales, pero sin caer en el mismo discurso de siempre. 

Entonces la tapa fue inspirada en los productores, en el equipo, en la creatividad en cada persona que forma parte de 3500, y también en ustedes, no podía dejar de lado a RDC sabiendo que el mejor cacao está en Ecuador. La inspiración nace yendo a investigar de dónde vienen los productos. 

¿Cuál momento del concurso fue el más significativo para ti y por qué? 
Cuando ya te toca presentar tu plato y empieza a correr el vídeo con el que concursaste. El jurado te regresa a ver, la gente te mira, y vives esa tensión fuerte de que ya tienes que sacar eso y debe ser perfecto, y ese es el momento en donde se acaba toda la tensión que viviste durante esos meses. Entonces es un momento mucho más de adrenalina por representar a tu país. 

¿Cuál fue el momento más significativo para ti al colaborar con los chefs Pachi Larrea y Rubén Arnanz? 
Con Pachi primero conocernos y saber que alguien está haciendo cosas tan increíbles en España con chocolate del Ecuador. Fue algo loco porque parecía que nos hubiésemos conocido de toda la vida, los dos con el mismo ideal, buscando lo mismo, transmitiendo lo mismo, sintiéndonos igual de orgullosos que cualquier persona que esté en cualquier lugar del mundo. Los dos admirándonos un montón y programando ideas para el siguiente año, queremos es que el Ecuador se entere de que en España hay alguien del país que quedó campeón en una de las copas de pastelería más importante del mundo. Esas cosas son increíbles porque te llenas de orgullo. Y con Rubén en cambio fue demostrarle que nuestro país está lleno de grandes personas, amigos y productos, que no sólo somos el ecuatoriano que está de visita, sino que también somo el ecuatoriano que tiene grandes cosas para demostrar al mundo. Entonces el Ecuador es un país que inspira. 

¿Cómo fue para ti la experiencia de cocinar en colectivo junto a otros 7 chefs ecuatorianos en España, y qué opinas de estos espacios cooperativos entre chefs?  
Fue una cosa increíble porque no fue algo programado y yo no conocía a ninguno de ellos antes. Sólo empezaron a llamarnos para ayudarnos, y fue algo muy significativo para mí porque yo viajé sólo, sin nadie de mi equipo, por temas de visa, entonces les agradecí mucho por su apoyo. Nos reencontramos chefs ecuatorianos en un mismo país y nos dimos cuenta de que somos uno sólo. Entonces fue un tema muy de corazón más que cualquier cosa, entonces esas situaciones te llenan un montón. 

¿Qué piensas que la cocina ecuatoriana puede aportar a la gastronomía tras participar en estas experiencias?
Regreso enamorado y con muchas más ganas de apostar por lo nuestro. Creo que todos buscamos esa excelencia desde cada una de nuestras trincheras.  

¿Cuál ha sido la enseñanza más importante para ti de este viaje y las experiencias que has compartido junto a otros chefs en España? 
Orgullo de que muchos cocineros ecuatorianos están haciendo alta cocina con nuestros ingredientes en otros países, podemos ser una potencia gastronómica gracias a aliados alrededor del mundo abriendo puertas y volviéndonos más fuertes.  

¿Cómo sentiste el ir acompañado de República del Cacao?   
Soy un fiel admirador de la marca porque siempre he tenido su respaldo y apoyo, los quiero mucho y admiro su inspiración como empresa aliada y amiga para darnos la mano, apoyarnos. Saber que no te vas solo y que hay un respaldo detrás es muy gratificante.   

¿Qué es lo que más feliz te hace de tu profesión? 
Transmitir por medio de la cocina una cultura tan rica como la nuestra que necesita ser reconocida por muchos en el mundo. 

¿Qué recomendaciones les darías a personas que quieren aventurarse en el mundo culinario? 
El miedo es el peor amigo del éxito, hay que ir paso a paso, pero pensando en grande. La vida nos va poniendo en el camino momentos y oportunidades que tenemos que aprovechar. Buscar la excelencia en lo que se hace y no rendirse, yo también quiero darme este mensaje, amar y respetar el trabajo.   
 
Estamos orgullosos de colaborar con Chefs en más de 20 países alrededor del mundo compartiendo su creatividad y visión. Conversar con el chef Alejandro Huertas nos llenó de inspiración y nos motiva a continuar cambiando el mundo un grano de cacao a la vez. Conoce más en el siguiente video: LINK


SÍGUENOS EN INSTAGRAM

ÚNETE A LA REPÚBLICA
DEL CACAO
ES